Eran las 16:45… Y caía y caía agua… Y tronaban y tronaban truenos, rayos y centellas… Y la Casa Abadía se inundaba… Otro sábado marcado por el mal tiempo… Había que ser valiente para acercarse a la Iglesia con el aguacero al que estabamos siendo sometido… Las expectativas eran bajas, la verdad…
Pero no, poco a poco, fueron apareciendo los paraguas, los coches, los chubasqueros, las botas de agua, y, dentro de ellos, muchos niños junto a sus padres y el templo poco a poco se fue llenando. Y así, celebramos el Día del Domund, aprendimos jugando las palabras más importantes del ser juniors y, luegom hicimos posavasos y sketchs de anuncios.
Y la semana que viene más. Y esperemos que sin lluvias. Y con cena de padres. Y con video en el Ayuntamiento.
¿Quién dijo que las tormentas dan miedo?